(Incom)Oda al Trabajo

Si el trabajo moderno tal y como se entiende en la sociedad postcapitalista fuese una charca, en este texto iríamos dando un paseo alrededor de la charca y preguntando a las ranas qué opinan de su húmedo entorno.

Charca de ranas

... Empezamos el paseo, me arremango, agarro del pescuezo a la primera rana de la izquierda que me mira sugerente (¿tiene una rana pescuezo o solo espalda y cabeza pegadas en bloque?), la entrevisto, la echo al agua y cojo a la siguiente...

Rana agarrada El trabajo es castrante

Todo el mundo es tan tonto como tenga que ser para mantener su trabajo.

Alguien lo dijo, yo lo copié y pegué aquí de algún libro, creo que puede ser una adaptación de la siguiente cita de Upton Sinclair:

Es difícil conseguir que un hombre entienda algo cuando su trabajo depende de que no lo entienda.

Rana agarrada El trabajo es pegajoso

El lugar de trabajo evoluciona constantemente para acomodarse más al esclavo asalariado. Esto incluye, entre otras cosas, servir de remedio para el aburrimiento, de plataforma para la creación de redes sociales y de consuelo emocional a través de la seguridad económica. Estas pequeñas relaciones personales con el trabajo desempeñan un papel importante a la hora de frenar los esfuerzos por organizar una revuelta obrera masiva. En otras palabras, mucha gente disfruta de la esclavitud asalariada, e incluso sabotea los esfuerzos para organizarse contra ella.

Odiamos a los jefes, pero queremos ser empleados a cualquier precio.

Rana agarrada El trabajo como dicotomía Explotación-Implicación

Hoy en día en las sociedades occidentales se analiza el trabajo en términos de implicación, tanto te implicas, tan arriba llegas, no existe la explotación porque somos sociedades avanzadas ¿verdad? ... ¿Verdad?

En el pasado Marx analizó el trabajo en términos de explotación, no consideró que pudiese haber alguien que quisiese implicarse en su trabajo porque le gustase.

Simplificando la cosa, supongamos que si te implicas llegas alto (ganas pasta, tienes beneficios) y si te explotan en tu trabajo, esto tiene un coste personal alto (lo pasas mal, tienes costes).

Si analizamos estos dos ejes Implicación-Explotación obtenemos 4 cuadrantes, tal y como se muestran en esta bella imagen:

Implicación Explotacion

  1. SÍ te explotan y NO te implicas: Tiene alto coste personal y pocos beneficios, estas jodido amigo.
  2. SÍ te explotan y SÍ te implicas: Esto tiene un alto coste personal y altos beneficios, estás dentro del sistema, estás pagando por lo que obtienes, allá tú.
  3. NO te explotan y NO te implicas: Tienes bajo coste personal y pocos beneficios, te mantienes en los bordes del sistema, estás pagando por lo que obtienes.
  4. NO te explotan y SÍ te implicas: Tiene bajo coste personal y altos beneficios (porque te implicas o parece que lo haces), estás hackeando el sistema, dinos tu secreto, has encontrado un fallo en la maquina dispensadora de refrescos, es probable que dure poco.

Disclaimer. No olvidemos que Marx era un tío listo. Esto era lo que quería decir. Puedes estar de acuerdo con él o no, pero si crees que no era un tío fino, una especie de cirujano conceptual, es que solo sabes de él lo que comúnmente se conoce de él, relativo al comunismo, etc. (del que él no explicó cómo había de llevarse a cabo, eso fue cosecha propia de Lenin y otros). Lo siento, no lo siento por ti, colega.

Rana agarrada El trabajo como carrera de ratas (o de ranas)

Cuanto más tienes, más gastas y más te endeudas. El aumento de la demanda de bienes de consumo obliga a la gente a dedicar muchas horas de trabajo para pagar esos bienes, lo que Schor llama el síndrome de trabajar y gastar. Este enfoque en el consumo significa que muchas personas renuncien a la opción de cambiar hacia un modelo de vida de menos trabajo y más tiempo de ocio porque ello les obligaría a tener menos bienes y servicios.

Rana agarrada El trabajo no siempre tiene sentido

"Siento que estoy desperdiciando mi vida", me dijo. "Cuando me muera, ¿le va a importar a alguien que haya ganado un punto porcentual más de rentabilidad? Siento que mi trabajo no tiene ningún sentido".

"Si pasas 12 horas al día haciendo un trabajo que odias, en algún momento no importa lo que diga tu sueldo".

Estas citas están copiadas de por ahí. Lo importante es que pienses si tu trabajo tiene sentido o contribuye de alguna forma a mejorar el mundo. Si quieres leer un buen ensayo sobre este tema puedes revisar Bullshit Jobs: A Theory del antropólogo David Graeber, pero te lo puedo resumir rápida y sacrilegamente: Si dudas sobre si tu trabajo tiene sentido o aporta algo bueno al mundo es muy probable que la respuesta sea -NO- y si tu trabajo desapareciese, el mundo seguiría yendo igual, probablemente incluso mejor.

Es jodido pensarlo ¿eh? El daño moral y espiritual que se deriva de esta situación es profundo. Es una cicatriz en nuestra alma colectiva. Sin embargo, prácticamente nadie habla de ello (puedes echar un ojo a cierta famosa red social de trabajo, donde todo el mundo está encantado de sus trabajos y carreras profesionales, moviendo papeles de aquí para allá, generando contenidos, creando dinámicas, sinergias, eficiencias, conexiones, coexistencias y muchísimas otras cosas que nadie sabe para que valen).

Nos hemos convertido en una civilización basada en el trabajo, ni siquiera en el "trabajo productivo", sino en el trabajo como fin y sentido en sí mismo y aquí hay una profunda violencia psicológica. ¿Cómo se puede siquiera empezar a hablar de dignidad en el trabajo cuando uno siente secretamente que su trabajo no debería existir? ¿Cómo no va a crear un sentimiento de profunda rabia y resentimiento?

Al final, esto de trabajar en algo que no tenga sentido o que incluso es contraproducente -generalmente bajo las órdenes de una persona que nos desagrada- conlleva que nos irritamos con el hecho de que pueda haber otros que no estén en la misma trampa:

Además, los políticos han tenido un éxito notable al movilizar el resentimiento contra los maestros de escuela y los trabajadores de la industria del automóvil (y no, significativamente, contra los administradores de la escuela o los ejecutivos de la industria del automóvil que realmente causan los problemas) por sus salarios y beneficios supuestamente inflados.

Rana agarrada El trabajo como despersonalización

A menudo cuando alguien va a trabajar se desengancha del YO, para dejar que su mente y músculos sean una herramienta empleable en los procesos de negocio. Digamos que a las 9:00 entro a la oficina o a la fabrica, a las 8:59 entraré en un estado mental de suspensión personal que me permita hacer y decir lo que se espera que haga y diga, 8 horas, 5 días por semana, toda mi vida.

Pero, ¿qué son 8 horas de 16 que permanecemos despiertos? Bueno, suponiendo que pierdes exactamente 8 horas de tu día y no dedicas una o dos más a prepararte y desplazarte, es muy común llegar a casa exhausto y que no te quede suficiente YO para hacer algo que sea de tu interés y que no sea por ejemplo, beberte una cerveza viendo la última serie de Netflix que por supuesto no puedes perderte: Si este era tu plan cuando eras niño, pues genial, bebe tu cerveza y mira tu serie, nada que objetar. Si cuando eras niño soñaste con otro tipo de cosas, experiencias y acciones, piensa por qué has tomado esta fácil opción por defecto y a quién beneficia que seas un agradable zombi.

Pensarnos en relación a nuestro trabajo es una tarea vedada para el trabajador/a en la organización social capitalista: el/ella debe ocuparse unicamente de ejecutar su tarea, no pensarla. Animarnos a pensarla colectivamente es un desafío que siempre debe ser alentado." (Conclusión del Taller, 2009 CPSSNQN)

Hay quien llama a esto feudalismo comercial, esto es la implantación en suelo presuntamente democrático de principios monárquicos o despóticos: Cuando en lugar de vender un producto vendes tu trabajo te vendes a ti mismo, perdiendo los derechos de los hombres libres y te conviertes en vasallo de los gigantescos establecimientos de una aristocracia que amenaza con la aniquilación a todo hombre que se atreva a cuestionar su derecho a esclavizar y oprimir. Y todo esto muy barato para ellos, nuestra libertad y derechos, nuestra salud, moral y la intelectualidad.

Rana agarrada Esto no es un ser humano, amigo

Pero todo esto lo digo porque soy un hippie, bla bla etc.

No exactamente, lo anterior es completamente inteligible para los fundadores del liberalismo clásico, gente como Wilhelm von Humboldt, por ejemplo, que inspiró a John Stuart Mill y que, al igual que su contemporáneo Adam Smith, consideraba el trabajo creativo emprendido libremente en asociación con otros como el valor central de la vida humana. Así, si una persona produce un objeto por encargo, escribió Humboldt, podemos admirar lo que hizo pero despreciaremos lo que es, no un verdadero ser humano que actúa según sus propios impulsos y deseos.

Coge la pasta Pero y entonces ¿qué propones?

Cuando alguien critica una cosa que le parece mala se le suele preguntar, pero ¿entonces, qué propones? y es una pregunta trampa porque te obliga a buscar una alternativa a algo que tal vez no tendría que existir o tal vez simplemente no es de tu interés.

Pero voy a morder el anzuelo... Supongamos que has de trabajar para ganar dinero y comprar filetes, macarrones, unos calcetines y todas esas cosas, esto propongo:

Solape de intereses

Frogs

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